sábado, 27 de abril de 2024 00:00h.

(Video) La otra cara de la visita de Obama a Cuba

Hoy las miradas de medio mundo estaban puestas en la visita del presidente Barack Obama en Cuba, sonrisas, la famosa foto con el paraguas, sonrisas mientras el presidente que acaba ya su mandato pasea por la Habana vieja y sobretodo mucho silencio. Pero un silencio discreto, un silencio verdadero, el silencio...
Hoy las miradas de medio mundo estaban puestas en la visita del presidente Barack Obama en Cuba, sonrisas, la famosa foto con el paraguas, sonrisas mientras el presidente que acaba ya su mandato pasea por la Habana vieja y sobretodo mucho silencio.

Pero un silencio discreto, un silencio verdadero, el silencio más preocupante, el de la izquierda mediática que se rasga las vestiduras cuando "malvados dictadores" reprimen al pueblo y reclama con insistencia el fin de todas las masacres del mundo, pero que baja la voz cuando se trata de Cuba.

El silencio no obstante también tuvo un tinte oscuro, la de las imágenes obviadas deliberadamente o pasadas rápidamente de la detención y represión de los opositores cubanos que con motivo del "Hito" del desbloqueo a Cuba son detenidos y reprimidos ante el silencio cómplice de parte de la extrema izquierda mediática.

No tardaremos mucho en ver dentro de unos días cuando la visita al régimen familiar comunista de los hermanos Castro quede en el olvido, a la izquierda y a los activistas pro derechos humanos, reivindicando y pidiendo justicia por la masacre o hambruna de algún país lejano, donde seguramente algún "tirano" al que ellos hayan asignado tal nombre pase a formar parte de los titulares periodísticos.

No obstante hoy solo escucharemos silencio, o incluso aprobación de un régimen que si no enarbolara la hoz y el martillo sería objeto de las más virulentas críticas por parte de la extrema izquierda como sucede cuando nuestros gobiernos visitan otros regímenes como Arabia Saudí y sin olvidar los periódicos recuerdos históricos a los regímenes dictatoriales no afines al izquierdismo, pero no obstante hoy parece que es el día de ignorar y obviar elogiar al que sonríe al hermano del tirano de cuba y de agradecerle que tenga la gentileza de "rebajarse a recibir" a un presidente que ha sido electo.