Corren malos tiempos para la libertad ideológica en España, las nuevas generaciones de españoles, educados en el odio hacia su propia patria y muy mermados ideológicamente, tienen una visión del mundo y de la política de un solo color, y no es de extrañar que jóvenes como Carlos Pons, quieran exterminar a todos aquellos que no piensan como él.

El integrante de la comisión ejecutiva de Esquerra de Menorca y número tres de las listas de Unidad Popular en las pasadas elecciones generales, Carlos Pons Camps, comentó este martes a través de su muro de Facebook (que tiene abierto) algunas frases de carácter marcadamente violento.

En una de ellas, Pons Camps escribió que «todavía quedan, como mínimo, unos 10 millones de ignorantes a exterminar antes de volver a celebrar unas elecciones». En otra frase, y dentro de la misma conversación, Pons Camps afirma que «como tengamos que ir a nuevas elecciones y encima votéis la misma mierda, habrá sangre... Lo prometo!».

Acto seguido, pone la coletilla a sus comentarios: «Ya estoy más tranquilo. Ahora podeis decir que no sé hacer reflexiones políticas profundas, serias y educadas», con una evidente ironía.

El PP ha denunciado este miércoles públicamente estas declaraciones, que considera constitutivas de un delito de injurias y amenazas.

El PP pide a Esquerra de Menorca y a Ara Maó (formó parte de su lista electoral) que cesen a Carlos Pons de cualquier tipo de responsabilidad. Espera además una condena de todos los partidos.