Beatriz Talegón se hizo famosa por unas declaraciones donde decía que era imposible hacer la revolución desde un hotel de 5 estrellas, después se descubrieron los sueldos que recibía de la Eurocámara y la reputación de la ex representante internacional de las Juventudes Socialista no quedó en muy buen lugar.

Tras la prohibición de la exhibición de banderas esteladas y antes de que un juez levantara dicha prohibición, la dirigente socialista incendió las redes sociales con un tweet que animaba a los hinchas del Sevilla a llevar la estelada para según ella "defender la libertad".

Se ha leído, oído y dicho de todo, desde que Dancausa sacara a la luz la prohibición de exhibir banderas separatistas catalanas, desde la ausencia del presidente de la Generalitat hasta la de la alcadesa de Barcelona, pasando por la amenaza del presidente del F.C. Barcelona, Josep María Bartomeu.

Lo que esta claro es que la libertad de expresión en este país es unidireccional, sólo se aplica en una dirección, mientras unos pueden seguir humillando e insultando los símbolos de todos los españoles, otros apenas pueden abrir la boca por miedo a que se les denuncie o se les tache frívolamente de pertenecer a una ideología política que no pertenecen.