Así lo explica este martes el vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, en una entrevista a Vilaweb. Junqueras cree que es "poco significativo" si se hace una declaración o una proclamación de la independencia, porque, sea como fuere, el país empezaría a funcionar como un Estado. El independentismo buscaría "el aval" ciudadano en el proceso en las posteriores elecciones constituyentes y en el referéndum de la Constitución.

Si la aprobación de las tres leyes hará que "de facto" Cataluña pase a actuar como un estado independiente, "las elecciones constituyentes serán de facto el mecanismo de ratificación popular de las decisiones que se acaban de tomar". Junqueras prevé que el nuevo Parlament elabore la Constitución de la República y, en la medida que los ciudadanos refrenden la Constitución, refrendrarán la República y también el proceso".

Hasta el momento de la "desconexión", el Gobierno y el Parlamento trabajarán para construir las estructuras y las leyes necesarias. El líder de ERC está convencido que las tres leyes principales se tendrán que aprobar con poco margen de tiempo entre ellas porque, "evidentemente", el Tribunal Constitucional las considerará inconstitucionales. "Tiene que haber un momento, necesariamente, para aprobar la ley de transitoriedad jurídica, la de la seguridad social y la de la hacienda propia, en que el Parlamento de Cataluña actúe como el de un estado independiente, seguro", subraya. Con las nuevas leyes en vigor, la catalana sería la única legislación vigente en Cataluña y el marco constitucional español dejaría de ser aplicable.