La Generalitat de Cataluña sancionó a 91 empresas en 2015 por multas lingüísticas
El afán recaudatorio y la imposición lingüística ha hecho que 91 empresas hayan sido sancionadas por no rotular en Catalán, vulnerando la derechos fundamentales de los empresarios a rotular en el idioma que prefieran. De las 68 empresas, 21 tienen la sede social fuera de Cataluña.
La recaudación del 2015 ha...
29 de abril de 2016 (21:16 h.)
El afán recaudatorio y la imposición lingüística ha hecho que 91 empresas hayan sido sancionadas por no rotular en Catalán, vulnerando la derechos fundamentales de los empresarios a rotular en el idioma que prefieran. De las 68 empresas, 21 tienen la sede social fuera de Cataluña.
La recaudación del 2015 ha sido de 140.000 euros casi triplicando en el ejercicio del 2014 que fue de 51.350 euros. Dónde la Generalitat aumenta la imposición del catalán en el mundo comercial. Obligando a los empresarios a cambiar la rotulación en contra de su voluntad y de sus intereses económicos.
En Cataluña ante la presión fiscal y el amparo de la Generalitat a grupos separatistas han echo que muchos empresarios se hayan sido abocados al cambio de rotulación asumiendo los gastos que conlleva.
A fecha del 6 de abril de este año, 43 empresas empresas perseguidas habían sido denunciadas por particulares. Donde la Generalitat da amparo a los denunciantes y a la persecución de los empresarios que generan puestos de trabajo.
El resto de expedientes han sido abiertos por la Generalitat a través de la agencia catalana de consumo y de la cual esta persecución hacia el sistema productivo catalán esta financiada con dinero y recursos públicos.
La "Vulneración de derechos lingüísticos" tal cómo lo expone el gobierno separatista, ha ido precisamente a multar a pequeñas y medianas empresas a las que tienen poco recorrido de recurrir jurídicamente.
María José García Cuevas del Partido Popular de Cataluña denunció en el parlament que se retirara la presión política a los pequeños empresarios por someter a los comerciantes a los intereses políticos de la Generalitat. Haciendo una proposición para la suspensión del régimen lingüístico.
La "Ley de Código de Consumo de Cataluña" fue impulsada por el propio Jordi Pujol en 1988 de la cual no se iba aplicando hasta recientes años. De la cual se pretende que la sociedad se des-hispanice.