Corren malos tiempos para la libertad de expresión en Cataluña, el proceso que algunos quieren vender como pacífico, festivo y familiar, se está convirtiendo en una caza al disidente, en una persecución a todo aquel que no comulga con el pensamiento único separatista, y que además tiene la "osadía" de manifestarlo públicamente.

La asociación "Barcelona con la Selección" ha presentado este lunes ante la Fiscalía una denuncia por la agresión que sufrieron dos de sus colaboradoras el pasado sábado en el barrio de Sant Andreu de Barcelona. Cinco jóvenes "encapuchados en su mayoría, con una estética determinada y al grito de 'putes espanyoles, fuera de aquí, os vamos a matar'" arrasaron la carpa que esta asociación había colocado en la calle, con permiso municipal, y rompieron todo el material que había, según los denunciantes que añaden como los presuntos agresores tiraron al suelo a las dos chicas que estaban ante este punto informativo y les dieron golpes y patadas, además de robarle el bolso a una de ellas antes de salir corriendo. Una de las víctimas sufrió erosiones, hematomas y contractura cervical, según el parte médico, por lo que los agresores podían haber cometido un presunto delito de lesiones con el agravante de actuar por motivos ideológicos.

Tras la primera agresión, las afectadas avisaron a la policía que se personó ante la carpa. Pese a esto, la asociación denuncia que poco después de que los agentes se fueran un coche se paró cerca de las colaboradoras, que estaban recogiendo el material, y "otro grupo de intolerantes les han vuelto a agredir" con empujones, las insultaron, les escupieron y les tiraron líquidos. La entidad destaca que tienen vídeos y fotos de las agresiones, así como el número de matrícula del vehículo. También añaden que "vamos a tomar cuantas acciones legales sean necesarias ya que no es una cuestión de ideología, ni de colores, es la falta de libertad, de poder promover algo tan sano como el deporte y tan bonito como es la selección española". Pese a esto consideran que se trata de "un hecho puntual" que esperan que no se repita.

La agresión se produce después de que la plataforma Barcelona con la Selección anunciara la pasada semana que ha conseguido un emplazamiento, todavía secreto, para colocar las pantallas gigantes pese a que el Ayuntamiento sigue negándose a permitir que se ubiquen en la vía pública.