sábado, 04 de mayo de 2024 00:01h.

Carmena veta las terrazas de los bares para que los okupas puedan hacer botellón

La capacidad para sorprendernos de Manuela Carmena comienza a ser algo digno de estudio, tras su "talento inversor" con el sistema de riego de la plaza de la villa, su particular "cabalgata" y el espectáculo de las marionetas del terror, la última medida sorpresa se está preparando para el dos...
La capacidad para sorprendernos de Manuela Carmena comienza a ser algo digno de estudio, tras su "talento inversor" con el sistema de riego de la plaza de la villa, su particular "cabalgata" y el espectáculo de las marionetas del terror, la última medida sorpresa se está preparando para el dos de mayo.

El dos de mayo, fiesta autonómica en la Comunidad y Ciudad de Madrid es tradicionalmente una fecha en que madrileños y madrileñas suelen aprovechar la festividad para tomar unos aperitivos o unas copas, de paso también el sector de la hostelería del centro de la capital que sobretodo con las terrazas, remonta el bache de la crisis.


Bueno, quizás a partir de ahora debamos hablar en pasado ya que ante la estupefacción de este sector, el consistorio de Carmena hizo llegar una carta que no dejó indiferente a ningún hostelero de Malasaña, dice textualmente «Estimado señor o señora: Con motivo de la celebración de las Fiestas del Dos de Mayo, se le comunica que deberá retirar la terraza de veladores del 29 de abril al 2 de mayo de 2016, en horario de 11.00 a 1.00 horas. Le comunico, así mismo, que deberá seguir en todo momento las indicaciones de la Policía Municipal»

Podríamos suponer que dicha medida, aunque restrictiva en exceso persigue por así decirlo el "buen descanso vecinal" o la prevención de altercados, no obstante dicha suposición entra dentro de la lógica y eso no entra dentro de las políticas de Manuela Carmena ya que lo que la alcaldesa de la marca blanca de Podemos en Madrid tiene previsto, es ceder los espacios del centro a lo que ella denominan "centros sociales" es decir un eufemismo de "okupas" e instalar barras de bebidas a "precios populares" lo que también es un eufemismo de subvencionados por el ayuntamiento.

Talleres de Sexología, Clases de Tango una mesa de Amnistía Internacional, todo tendrá cabida en el centro de Madrid menos las terrazas que para colmo de los hosteleros tendrán que contemplar como la Policía Municipal se ve obligada a hacer la vista gorda a un macro-botellón que ya se ha anunciado.