El consistorio barcelonés de Ada Colau ha decidido por primera vez suprimir la gratuidad de zonas azules y verdes para turistas y visitantes, la medida según la alcaldesa de la formación de extrema izquierda "Guanyem Barcelona" es supuestamente incentivar el transporte público y el uso de la bicicleta. No obstante este supuesto incentivo ya ha topado en numerosas ocasiones con el ya eterno conflicto con los sindicatos del metro y autobuses de Barcelona los cuales han paralizado la ciudad condal en numerosas ocasiones escogidas especialmente en eventos importantes como factor de presión para ganar fuerza negociadora en la renegociación de sus condiciones.

Ésta medida no exenta de polémica tanto por su más que evidente transfondo recaudatorio se añade a las políticas llevadas a cabo por Colau con respecto el sector turístico en Barcelona como por ejemplo la suspensión de concesión de licencias, la restricción de horarios de locales de venta de souvenirs para extranjeros o la moratoria aplicada a la construcción de hoteles.

Recordemos que el sector turístico en Barcelona es uno de los principales motores económicos de la ciudad tanto por el atractivo artístico como por su asequibilidad económica para turistas de ámbito internacional y visitantes del resto de España.