viernes, 19 de abril de 2024 04:26h.
Opiniones
Joan Marti

Lahore, Pakistán, ¿Qué es eso?

La falta de valor se hace patente ante la casi inexistente cobertura ofrecida en relación con el atentado en Lahore.

La masacre de casi un centenar de cristianos no tiene el calado de otras noticias o más bien, los medios no están dispuestos a marcar sus posiciones y la cobardía es manifiesta a la hora de tratar la matanza de cristianos que celebraban la Pascua, en su mayoría mujeres y niños.

Esto muestra que no todos los muertos deben valer lo mismo y no todos merecen el mismo respeto para los medios de comunicación, o quizá es la pusilanimidad la que habla por todos ellos, cuanto menos vergonzoso.

Debemos mantener la firmeza ante la atrocidad y defender nuestros derechos y libertades sin miedo y sin ceder a un chantaje tan mezquino y despreciable.

No se puede vivir bajo el yugo de aquellos que se creen con el derecho a aniquilar a quienes profesan creencias que ellos no comparten y además, lo más deplorable, es que disfrutan de la bula infame por parte de los que no se atreven a alzar la voz contra ellos.

Que quede claro para todo el mundo, los autores del atentado han asegurado que han ejecutado el ataque "contra los cristianos que celebraban la Pascua", ese era su objetivo y no ha sido casual. Además de la atrocidad y barbarie del acto en sí,  es un nuevo intento de diezmar al cristianismo.

Frente al salvajismo, valor, ante la crueldad, firmeza y contra la lacra terrorista, jamás bajar la voz y mostrarse condescendiente ni sumiso.

Susana Corredor