El exalcalde de CDC falsificó documentos para legalizar la situación de cientos de inmigrantes que procedentes de Marruecos y que viajaban directamente a su ayuntamiento según indica lo hizo por "Motivos Humanitarios", la realidad es que la policía lo detuvo por formar parte de una red de tráfico de personas. 

La policía inició la investigación al constatar que en un pueblo de 350 habitantes había una cifra muy alta de inmigrantes que disponían de un certificado conforme vivían allí e iban al ayuntamiento de Igualada para regular su situación mediante el arraigo social expedido en Santa fe del Penedes, en los certificados no constaba ningún tipo de número de registro pero si la firma del exalcalde.

De la investigación se desprendió que una banda de marroquíes cobraban 1.000 euros a cada inmigrante que quería un certificado. Aunque esa era la parte final de la trama que empezaba en marruecos con el pago de 8.000 para poder entrar en la península ilegalmente.

El exalcalde de CDC llegó a declarar que “Corrió la voz. Un día tuve que llamar a los Mossos, porque no podíamos salir del pleno por la gente que había pidiendo certificados”. También afirmó que el jamás cobró dinero alguno. 

Es por ello que la justicia le condenó a 2 y 3 meses de cárcel, Surià entonces pidió el indulto alegando que lo hizo por razones humanitarias siendo este alegato desestimado por el Gobierno y teniendo que cumplir la pena impuesta.