Dice la sabiduría popular que en la vida una cosa es predicar y la otra recoger trigo, ésta frase tiene su plasmación en la reacción que tienen cuando aquellos señores de ERC los cuales se creen con el monopolio moral, sufren los mismos "escraches" que ellos mismos organizan contra otras fuerzas políticas.

Prueba de ello fue el pasado domingo cuando Esquerra republicana organizaba en Nou Barris un miting y en el transcurso de éste fue interrumpido por un hombre que replicó al orador en aquel momento Oriol Junqueras el cual ordenó el desalojo por parte del equipo de seguridad del individuo en sí.

Lejos quedan ya aquellos no tan tardíos tiempos cuando las juventudes de ese partido iban a increpar a su majestad el rey, eso si exigiendo respeto a la libertad de expresión para ellos y casi pidiendo que se agradeciera

ERC cuando apareció el espontaneo se olvidó de todas las consignas de "libertad de expresión" e hizo uso de su servicio de seguridad por un hombre que a diferencia de los homólogos de los separatistas ni siquiera estaba siendo violento y el cual sólo acusó de "nazis" y portaba una estelada con una cruz gamada para protestar por el liberticidio que se vive en Cataluña.