Tras el acuerdo de investidura del ya presidente de la Generalitat Carles Puigdemont y a pesar de los compromisos acordados como condición para la retirada de Artur Mas, las discrepancias entre la formación marxista y Junts pel Si han reaparecido nuevamente.

Esta vez se trata de los presupuestos cuya inversión en "gasto social" le parecen insuficientes además de las designaciones en los medios de comunicación de gente afín a la antigua Convergencia han supuesto un motivo de incomodidad, no obstante Anna Gabriel ha mantenido que el proceso de desconexión se ha de llevar a cabo y que harán todo lo posible.