La CUP y diferentes colectivos vinculados a la extrema izquierda lograron reunir a una veintena de personas para pedir la expulsión del Padre Custodio Ballester, más conocido como el cura de la Legión. Los violentos han pedido como cada año que se acerca la Semana Santa la expulsión del sacerdote por el simple hecho de que durante las últimos años ha permitido sacar en procesión al Cristo de su parroquia a la Antiguos Caballeros Legionarios de Barcelona, llegando a congregar cerca de 4.000 personas en la procesión.

Los ultra izquierdistas que acusan al Padre Custodio Ballester de 'fascista' por dejar el cristo de su parroquia a los legionarios para que procesionen por las calles de Hospitalet de Llobregat, también se manifestaron ante el Arzobispado de Barcelona bajo el lema “fascistas ni en el altar ni en ninguna parte”, han gritado consignas como “fuera fascistas de nuestros barrios”.

La poca afluencia de congregados ultra izquierdistas deja a relucir que los que se concentraron no eran vecinos de la ciudad, y para corroborarlo los ultras quedaron como punto de reunión antes de iniciar la protesta en la parada de metro cercana a la espera de que llegaran más violentos de la ciudad de Barcelona, y como contrapartida la parroquia de la Inmaculada Concepción de la que es rector el Padre Custodio se llenó con centenares de vecinos y legionarios como muestra de apoyo.