Las monjas de la orden de Belén que viven junto al Real Monasterio de Sigena han denunciado que la televisión pública catalana (TV3) que ha grabado las instalaciones donde habitan y la iglesia con un dron sin tener ninguna autorización.

La queja fue trasladada a la Guardia Civil, que comunicaron a los tres técnicos que hacían ir el artefacto (dos operadores y un cámara) que estaban cometiendo una ilegalidad a la vez que las monjas amenazaron con interponer una denuncia en el supuesto de que se emitiera alguna imagen grabada.

Los agentes han comunicado este hecho al gobierno aragonés, que este viernes ha hecho público un comunicado en el cual se lamenta que la Televisión de Cataluña (TV3) "intente vulnerar el código deontológico y el derecho a la información para pretender obtener imágenes sin solicitar los permisos correspondientes". El ejecutivo lamenta "el malestar generado" por esta grabación.

El caso del arte sacro de Sigena se ha utilizado como arma política arrojadiza por parte de la Generalitat de Cataluña, generando tensión entre los gobiernos catalán y aragonés.